Un día sin celular, nada de correo electrónico, ni myspace, twiter o facebook puede liberarte de ser un elemento rastreable y dejarte tiempo para leer un libro.
Además te separa de unos 4 millones de usuarios promedio y un 71.5% de la población que recibe radiaciones telefónicas directamente en su pecho.
También puede pasar que a tu mamá le de un infarto por no localizarte, que te boten del trabajo por no atender la llamada de tú jefe o que tu novi@ te pique en pedacitos por no reportarte e imaginar que estas con el otr@ y, por supuesto, que se te caiga el ligue que tienes cocinando en el Chat de messenger o en google talk.
Quisiera convencerte para que pase un día, es decir, 24 horas (ni Jack Bauer pues) sin los artilugios modernos que la tecnología actual nos tiene acostumbrados, o sea, pegados a las conexiones (o conecciones)…