Calvin ha recibido un nuevo tratamiento. La terapia de ElectroShock Convulsivante, para regenerar su conducta infanto-destructiva, que le produce alucinaciones que luego medita en la intimidad de su cerebro.
A Calvin lo obsesiona la predestinación. Calvin esta envejeciendo sin crecer y la cercanía de la muerte lo lleva a cavilar sobre su naturaleza humana...
Cavilando, Calvin se interroga. No se por que, pero la muerte y yo siempre hemos estado muy cerca. Me miro al espejo y veo como mi cara se descompone imitando un ataque cardíaco. En la playa, simulo estar ahogándome o que un tiburón se merienda mis piernas.
Nunca hubo un diciembre que no aprovechara la explosión de algún coheton, para lanzarme al piso y sentir que estoy en Vietnam y una bala me perfora un pulmón. ...
¿Que tengo con la muerte?
Imagino como todos, que algún día voy a morir. La simpática e inofensiva nalgada del obstetra, fue el comienzo... ¿Del fin? ...
¿Como sera ese día? ¿Quienes irán a mi entierro? ¿Y Hobbes? ¿Tendre la urna abierta como en las películas?
Creo que el inició del uso de anestésicos, barbitúricos y relajantes musculares para acompañar mi terapia me han modificado. Me introducen una onda eléctrica de breve pulso para disminuir la cantidad de corriente necesaria para mi tan esperada muerte.
