Este proyecto nació por una mujer y se ha mantenido en el tiempo por el bendito milagro de seguir conociendo a otras. Así que dedico estas letras a la creación más bella. Las mujeres. Por ustedes el arte, la música, las guerras, las penas, las glorias, el amor, el erotismo... "Y el cómic"
El joven seminarista procuraba, pues, no acariciar completamente ninguna imagen antes de dormirse. Cuidaba de ponerse de costado, no de espaldas, postura señalada por la teología moral como una de las causas que podían inducir a la lujuria.
Buffy pensaba en el encuentro con Willow esa noche, sentía una agradable expectativa. Todo seria nuevo e intacto. La conversación podía rozar mil temas. ¿Y físicamente? Buffy no sabia muy bien que esperar.
Estaba celebrando la llegada del año cuando tocaron el timbre. Fui a ver de quien se trataba, abrí y había un señor mayor, su pelo estaba canoso por el paso del tiempo y tenía muy marcadas las arrugas de la frente.
¿Y pa´l cochinito qué?. Por sobre renos, muñecos de nieve y demás actores ajenos a nuestro paisaje, el cochinito es el genuino icono de la navidad venezolana.
Imaginativa hasta el infinito, esta es una de esas pocas películas en las que mientras fluyen los títulos de los créditos, tienes la sensación de haber estado en un maravilloso sueño del que habría sido mejor no despertar.
Que el formato de animación no te frene, es una de las mejores películas que podrás encontrar...
La gente cree que es una letra oscura, pero no. Robert lo metaforizó y lo hizo complicado, pero en realidad tiene un significado simple: la búsqueda de la esperanza. Sentirte perdido y encontrar la vida. Eso significa la escalera al cielo”...
Todo el mundo sabe, al parecer, lo que se debe de hacer con todo y con todos los problemas, hasta que se enfrentan con ellos. Tal y como dicen en el oriente: "Lo que tenga que ser, será"...
Buenas, aqui va otra conversación entre personas anormales, nótese que digo personas y no gente. En fin. Otra amena charla de psicópatas que usan medios digitales para comunicarse.
Una mujer va a visitar a su mamá, trae una bolsa con víveres y un ramo de flores para alegrar el lugar. Lo que ella no sabe es que tres días antes su madre se cayó de un banco en la cocina. Se golpeo la cabeza y se le quebró el cuello.
Setenta no es sólo un bonito número redondo. Cuando cumplo setenta años, en lugar de una declaración solemne, una exhortación a la energía, un discurso erudito o un grito de fiesta, me hago una pregunta.
Uno se cree Que las mato el tiempo y la ausencia Pero su tren vendió boleto de ida y vuelta. Son aquellas pequeñas cosas que nos dejo un tiempo de rosas en un rincón, en un papel o en un cajón.
En mil novecientos cincuenta y cinco, salí de mi madre pero entre al vientre del mundo. La lluvia borro mis huellas y ya no supe como volver a mi madre.